El Ojo de Halcon o "Hawk-Eye" en inglés es una tecnologia desarrollada por la empresa Roke Manor Research Limited para la decision de jugadas dudosas en deportes de precision como el cricket o el tenis.

Dirigido por el Dr. Paul Hawkins y financiado por la Corporación de Televisión, nace a principios del 2001 el concepto que hoy en dia conocemos como "Hawk-Eye". Mas tarde en sptiembre del mismo año Hawk-Eye Innovations Ltd. se presenta como una compañía independiente y se complementa con otra llamada Hawk-Eye Sensors Ltd. la cual implementa sensores en la superficie de la cancha para determinar con mas precisión la posicion de la pelota. Dichos sensores envían una señal electrónica cuando una bola golpea la superficie de la pista sobre unos alambres finos colocados en las zonas limítrofes de la cancha.

Los sistemas de Ojo de Halcón están basados en cálculos de triangulación a partir de imágenes visuales y mediciones de tiempo proporcionados por cámaras de vídeo de alta velocidad que superan con creces los 29.97 frames/s de un video en formato NTSC alcanzando incluso valores de 2 millones de frames/s. Deben de existir al menos 4 cámaras colocadas adecuadamente alrededor de la zona de juego para proporcionar los datos necesarios de una forma fiable.
Estos datos son procesados por un ordenador de alta velocidad, que reconoce la pelota y calcula su trayectoria determinando en cada momento la posición de la bola en el plano de la pista (coordenadas x, z). Para ello el ordenador necesita un modelo del área de juego, la posición de las cámaras y su lugar de enfoque. Como resultado de estos complicados calculos, se obtiene una simulacion de la posición de la pelota en 3D para cada imagen, partiendo de, al menos, dos cámaras que han tomado una imagen de forma simultánea. Este cálculo se realiza para cada frame de la cámara, lo cual nos proporciona la última coordenada necesaria, la del tiempo.

Estos ordenadores también tienen en cuenta la deformación de la pelota y su deslizamiento, y tiene un margen de error de entre 2 y 3 milímetros o lo que es lo mismo una eficacia del 99 %.
Valiéndose de las leyes físicas, se interpolan las distintas posiciones calculadas para recrear la trayectoria seguida por la pelota y su interacción con el área de juego (el bote de la pelota, por ejemplo) mostrándo una virtualización a jueces, telespectadores etc. La generación de la imagen tan solo tarda unos pocos segundos, con lo que la interrupción del juego es muy pequeña. El ojo de halcón también se utiliza para ofrecer repeticiones, medir la velocidad de las pelotas en cualquier momento, y otro tipo de estadísticas que se nos ofrecen habitualmente en los partidos; en el caso del tenis, el patrón de colocación de los servicios, dirección de la bola en cada instante, profundidad y trayectoria de los puntos directos, tiempo que pasa cada tenista en cada zona del campo y todas las estadisticas posibles que necesitemos.