Durante mucho tiempo nos sedujo la idea de llevar a escena un drama intenso, duro. Con esta obra nos enfrentamos, por fin, a este reto, al que nos acercamos con respeto, humildad y miedo, todo sea dicho. En MORIR... O NO MORIR hemos puesto toda la carne en el asador para hacer una representación merecedora del texto.

LA OBRA

En 1996, Sergi Belbel decide escribir una serie de escenas, a primera vista independientes, que bajo el título de MORIR... O NO MORIR, se acercan al siempre espinoso tema de la muerte. La muerte y... la esperanza.

   Morir o sobrevivir. Este es el dilema que plantea el autor en una obra en la que un sólo gesto, una palabra, puede cambiar el curso de los acontecimientos y desencadenar una tragedia o salvar una vida. Catorce personajes , entrelazados entre sí, confeccionan esta geometría dramática con pequeñas pinceladas cómicas.

   La dureza de un tema como la muerte y su complejidad nos lleva a pensar en el azar , el destino, que convierte una muerte evitada en una cadena de salvación. La muerte, antiteatral por naturaleza, es mostrada aquí, dura, sórdida, desnuda, fría. Y es su presencia, distante, cercana, la que nos hace pensar, reflexionar, sufrir...